domingo, 24 de febrero de 2019

LA NARRATIVA REALISTA. EL REALISMO. CONTEXTO HISTÓRICO SOCIAL DE LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XIX. LA NOVELA REALISTA.

EL REALISMO
LA NOVELA REALISTA

1. Actividad. Vídeo sobre la "Revolución industrial" en solo 7 minutos. Esta será puesta en relación con la novela realista.


2. Actividad. Explicación teórica del Realismo y las características de la novela realista.

LA NARRATIVA REALISTA Y NATURALISTA por Irene Truzman Tárraga

3. Actividad. Lectura de un texto realista y búsqueda de las CARACTERÍSTICAS vistas en la presentación anterior.

EL CESANTE

En esto estaba cuando sintió que su abuelo salía del despacho. Se le había apagado la luz por falta de petróleo, y aunque no escribía, la oscuridad le lanzó de su guarida hacia el comedor. En este y en el pasillo se paseó un rato el infeliz hombre, excitadísimo, hablando solo y dando algunos tropezones, porque la desigual y en algunos puntos agujereada estera no permitía el paso franco por aquellas regiones. 

Otras noches que se quedaban solos abuelo y nieto, aquel le tomaba las lecciones, repitiéndoselas y fijándoselas en la memoria. Aquella noche, Villaamil no estaba para lecciones, lo que agradeció mucho el pequeño, quien por el bien parecer empezó a desdoblar las hojas del martirizado texto, planchándolas con la palma de la mano. Poco después, el mismo libro fue blando cojín para su cabeza, fatigada de estudios y visiones, y dejándola caer se quedó dormido sobre la definición del adverbio. 

Villaamil decía: «Esto ya es demasiado, Señor Todopoderoso. ¿Qué he hecho yo para que me trates así? ¿Por qué no me colocan? ¿Por qué me abandonan hasta los amigos en quienes más confiaba?». Tan pronto se abatía el ánimo del cesante sin ventura, como se inflamaba, suponiéndose perseguido por ocultos enemigos que le habían jurado rencor eterno. «¿Quién será, pero quién será el danzante que me hace la guerra? Algún ingrato, quizá, que me debe su carrera». Para mayor desconsuelo, se le representaba entonces toda su vida administrativa, carrera lenta y honrosa en la Península y Ultramar, desde que entró a servir allá por el año 41 y cuando tenía veinticuatro de edad (siendo Ministro de Hacienda el Sr. Surrá). Poco tiempo había estado cesante antes de la terrible crujía en que le encontramos: cuatro meses en tiempo de Bertrán de Lis, once durante el bienio, tres y medio en tiempo de Salaverría. Después de la Revolución pasó a Cuba, y luego a Filipinas, de donde le echó la disentería. En fin, que había cumplido sesenta años, y los de servicio, bien sumados, eran treinta y cuatro y diez meses. Le faltaban dos para jubilarse con los cuatro quintos del sueldo regulador, que era el de su destino más alto, Jefe de Administración de tercera. «¡Qué mundo este! ¡Cuánta injusticia! ¡Y luego no quieren que haya revoluciones…! No pido más que los dos meses, para jubilarme con los cuatro quintos, sí, señor…». En lo más vivo de su soliloquio, vaciló y fue a chocar contra la puerta, repercutiendo al punto para dar con su cuerpo en el borde de la mesa, que se estremeció toda.
Miau, Benito Pérez Galdós

*ALGUNAS NOTAS SOBRE LA OBRAMiau es una novela del escritor español Benito Pérez Galdós publicada en 1888, dentro del ciclo de las "Novelas españolas contemporáneas". Enmarcada en el género realista, satiriza el Madrid burocrático de finales del siglo XIX a partir de las vicisitudes vitales de su protagonista, Ramón Villaamil, un competente exempleado del Ministerio de Hacienda, al que una serie de intrigas han dejado cesante

COMENTARIO DE TEXTO

A) Localización del fragmento. (Género literario, autor, obra, movimiento literario o época en que apareció). 
B) Resumen, estructura y tema.
C) Características del movimiento literario en el que se encuadra. 

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